Ilustración de Bruce Timm.
En la web Ectoplasmosis!, explican esta relación entre Lovecraft y los dinosaurios, que, sin ser muy relevante, si que la hubo. En primer lugar, el escritor poseía un fragmento de hueso fósil de dinosaurio. Lovecraft llevó a cabo durante toda su vida una colección de curiosidades de arte extraño, artefactos y cosas viejas, que le regalaban artistas o sus amigos ricos. En 1930, Clark Ashton Smith le dio a Lovecraft un fragmento de hueso de dinosaurio, y el escritor le respondió en una carta:
"¡Nada podría ser más apropiado para mis gustos o más estimulante para mi imaginación! Pensar en poseer los restos mortales (en parte) de una cosa de veinte pies de altura que vivía sobre los pantanos primitivos del Pacífico hace 50 millones años..., una cosa que pudo haber pisado la arena de varios colores de Lemuria, y olisqueado entre los obeliscos caídos de los Dioses Primigenios... una bestia en cuyo retorno el Gran Cthulhu podría haber montado en su palacio de la blasfema R'lyeh".
H. P. Lovecraft, "Carta a Clark Ashton Smith, 27 de febrero de 1930"
Publicada en Selected Letters: 1929 - 1931. Volumen III).
Ilustración de Antonio José Caparó.
Era cierto que el regalo de su amigo Clark Ashton Smith era apropiado para los gustos de Lovecraft, no solo por su gran interés en tiempos pasados, sino porque se sentía realmente atraído por los dinosaurios y los fósiles. En 1922, Lovecraft se acercó a un conservador del American Museum of Natural History, para saber algo más acerca de huevos de dinosaurio. Por esa época, eran solo una hipótesis, pero años más tarde se convirtieron en una realidad tras los descubrimientos de Roy Chapman Andrews en el Desierto del Gobi. El interés de Lovecraft estaba en que se le había ocurrido una historia acerca de la supervivencia y resurrección de huevos de dinosaurio e instó a su amigo Frank Belknap Long a llevar esta idea a cabo. Sin embargo, en 1930, apareció una historia similar de otro autor y Lovecraft lamentó que ni él ni su colega lo hubiesen hecho antes.
Ilustración de Abigail Larson.
La relación entre Howard Phillip Lovecraft y la paleontología queda reflejada de alguna manera a lo largo de toda su obra. Sirvan los ejemplos que nos muestran Francisco Gascó en esta entrada de El Pakozoico o Jorge Moreno en esta entrada de El Pantano del Purussaurus.
De nuevo, esta es una entrada compartida entre eL kOProFagO y Koprolitos.
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